Una actuación «audaz pero posible» es por la que apuestan los expertos para recuperar los meses perdidos en la eliminación del virus de la hepatitis C (VHC) en nuestro país. Se trataría de aprovechar los test masivos y la campaña de vacunación frente a la covid-19 para identificar a aquellas personas portadoras del virus.
Expertos reunidos en la jornada virtual celebrada por la Alianza para la Eliminación de las Hepatitis Víricas en España, AEHVE, con motivo con motivo de la European Testing Week y en el marco de su programa #HepCityFree, Ciudades Libres de Hepatitis, estiman que la experiencia y los avances en pruebas diagnósticas propiciados por la pandemia pueden ser de utilidad y aplicables a las estrategias de microeliminación.
Los expertos proponen convertir el impacto negativo de la pandemia en una oportunidad positiva para la estrategia de macroeliminación (en población general). ¿Cómo? Aprovechando para el diagnóstico del VIH y las hepatitis B y C las pruebas serológicas previas que serán necesarias en la vacunación frente a la covid-19. Una posibilidad que, a pesar de las dificultades, consideran factible y que reforzaría el liderazgo de España en la carrera de las grandes naciones comprometidas con el objetivo de la eliminación de la hepatitis C.
Un nuevo medicamento, indicado actualmente contra la hepatitis, podría ralentizar significativamente la progresión de la esclerosis lateral amiotrófica (ELA), según ha concluido una nueva investigación realizada por biólogos de la Universidad de Alberta (Canadá).
Los tratamientos actuales ralentizan la progresión de la enfermedad degenerativa en solo unos pocos meses, y estos hallazgos podrían “revolucionar” el tratamiento de pacientes con ELA, extendiendo y mejorando la calidad de vida.
El fármaco, llamado telbivudina, se dirige a una proteína que se pliega mal y no funciona correctamente en pacientes con ELA. “SOD1 es una proteína que se sabe que se plega y se comporta mal en la mayoría de los casos de pacientes con ELA.
Demostramos que telbivudina puede reducir enormemente las propiedades tóxicas de la SOD1, incluida la mejora de la salud de las neuronas motoras del sujeto y la mejora del movimiento”, explica el coautor del estudio, Ted Allison.
El equipo de investigación utilizó simulaciones por computadora para identificar medicamentos con el potencial de apuntar a la proteína SOD1. De esta lista, los científicos identificaron y probaron a los candidatos más probables, incluida la telbivudina, utilizando modelos animales.
De acuerdo a la agencia de noticias Reuters, previo a sacarla al mercado, la compañía está analizando opciones estratégicas para su vacuna, que podrían incluir un posible acuerdo de venta o licencia. Ver artículo.
Sin embargo, la firma también podría optar por seguir adelante con su propio lanzamiento. Las acciones de Dynavax cotizan a más del doble desde que el panel de la FDA diera luz verde para la aprobación de la vacuna en julio. Y ahora la compañía espera poder comercializar Heplisav a partir del próximo año.
Según Reuters, los analistas esperan que la vacuna gane rápidamente market sharesobre su principal competidor: Engerix-B, que lleva el sello de la británica GSK. Esto es en razón de que la vacuna de Dynavax se administra en menos dosis.
El mercado de la hepatitis está en pleno reajuste. Recientemente las norteamericanas Janssen y MSD dieron un paso al costado de la hepatitis C y le pusieron punto final a sus investigaciones clínicas en ese campo. Ver artículo.
Fuente: Pharmabiz