Veintiséis de un total de 29 pacientes bonaerenses con coronavirus evolucionan favorablemente gracias al plasma de otras personas que se recuperaron de la infección y que donaron ese componente de la sangre, rico en anticuerpos contra el virus pandémico.
Desde el ministerio de Salud bonaerense insisten en que quienes se recuperaron se comuniquen con la línea gratuita para donar sangre. Se calcula que por cada donación es posible salvar la vida de hasta cuatro personas con COVID-19.
Los casos constituyen un motivo de optimismo para las autoridades sanitarias de la Provincia de Buenos Aires quienes, a partir de la evidencia, insisten especialmente en la necesidad de que quienes superaron la enfermedad donen sangre para obtener plasma, el hemocomponente que podría convertirse en la primera “cura” para la infección que acecha al mundo.
En las últimas semanas, en la Provincia, se corroboró la recuperación completa en dos hombres adultos y notables mejorías en el estado de salud de una niña y de un bebé que aún permanecen internados. De estos cuatro casos, dos son varones de 43 y 40 años de edad que estuvieron internados en la terapia intensiva del hospital de Trauma Federico Abete de Malvinas Argentinas y ya fueron dados de alta. En tanto, los dos pacientes pediátricos tratados con resultados favorables son una niña de 12 años y un bebé recién nacido, ambos internados en el hospital provincial Sor María Ludovica de La Plata.
El director provincial de Hospitales, Juan Riera, detalló que “todos los casos forman parte del Protocolo Provincial de Investigación sobre Plasma de Convalenciente de COVID-19”, dirigido a pacientes COVID-19 positivos de moderados a graves.
“Hasta ahora se aplicó en 29 casos, de los cuales 26 mejoraron notablemente, 8 incluso fueron dados de alta y tres fallecieron. Se presume que las personas que murieron, quienes tenían otras enfermedades de base, ya estaban en una fase muy avanzada de la infección”, explicó Lorena Regairaz, inmunóloga y asesora técnica del Protocolo Provincial. Y aclaró que el plasma no reduce el daño que el virus ya provocó en el organismo “pero sí frena la viremia, es decir, la replicación del virus”.
El plasma se obtiene a partir de una donación de sangre de un paciente recuperado de coronavirus. La extracción y procesamiento está a cargo del Instituto Provincial de Hemoterapia, con sede en La Plata. A la sangre se le realiza un procedimiento llamado “aféresis”, que separa el plasma del resto de los componentes de la sangre. Allí mismo se prepara la unidad requerida y se la envía a los hospitales bonaerenses que lo necesitan.
“Para ser aplicado, el paciente con coronavirus o su familiar más cercano debe firmar un consentimiento informado donde se le explica que es parte de un protocolo, y se les dan precisiones del alcance de esta terapia que aún es novedosa y se está investigando pero que, afortunadamente, comienza a mostrar resultados auspiciosos”, comenta Riera.
Para la donación de sangre, los pacientes de la provincia de Buenos Aires que se hayan recuperado deben comunicarse a la línea gratuita del Cucaiba: 0800-222-0101. Las personas de La Plata pueden dirigirse al Instituto Provincial de Hemoterapia (calle 15 esquina 66) y aquellas que vivan en otros municipios pueden llamar a esa línea para solicitar que personal de ese Centro, dependiente del ministerio de Salud bonaerense, realice el traslado necesario para concretar la donación que es un procedimiento breve, indoloro y cien por ciento seguro.
Royal Philips líder mundial en tecnologías de salud, ha recibido autorización de las autoridades sanitarias de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) para comercializar una amplia gama de equipos ecógrafos para el tratamiento de complicaciones pulmonares y cardíacas relacionadas con la epidemia de COVID-19. Los equipos de ecografía portátiles, en particular, se han convertido en una herramienta muy valiosa para los clínicos que tratan a pacientes con COVID-19 por su capacidad de visualización y fácil desinfección.
Como resultado de esta autorización por parte de la FDA, la primera concedida a un fabricante de equipos médicos, Philips puede proporcionar una guía práctica detallada para ayudar a los profesionales sanitarios que usan sus equipos y software en pacientes afectados por COVID-19. La autorización de la FDA se aplica a una gran gama de ecógrafos de Philips, incluyendo las series EPIQ, Affiniti, Lumify, CX50 y Sparq, así como la solución del software de cuantificación avanzada QLAB.
Los ecógrafos han demostrado su importancia en el diagnóstico por imagen de tejido pulmonar periférico afectado por neumonía, una manifestación clínica estrechamente relacionada con las complicaciones por COVID-19.
Dado que el esfuerzo pulmonar puede derivar en disfunción cardíaca, los pacientes con COVID-19 tienen un mayor riesgo de padecer también complicaciones cardiovasculares. Un examen cardiológico por ultrasonidos puede ayudar a evaluar los efectos de la progresión de la enfermedad sobre la función cardíaca. Al realizar pruebas de ecografía a los pacientes con COVID-19 directamente en el lugar donde están siendo atendidos, por ejemplo, un box de emergencias o en la UCI, los clínicos pueden diagnosticarlos y monitorizarlos sin necesidad de moverlos de lugar, lo que contribuye a reducir el riesgo de transmisión del virus a otros pacientes o a los mismos profesionales sanitarios.
“Muchos centros sanitarios nos han comentado que nuestros ecógrafos de mano y portátiles están jugando un papel fundamental en sus esfuerzos contra el COVID-19”, afirma Bich Le, Vicepresidente senior y gerente general de ultrasonido en Philips. “Con esta autorización podemos ofrecer una guía clara y concisa para garantizar un uso seguro y eficaz de los ecógrafos en diagnóstico y tratamiento de complicaciones pulmonares y cardíacas asociadas a COVID-19. Al mismo tiempo, estamos invirtiendo muchos recursos para ampliar su producción en todo el mundo, incluyendo en nuestras fábricas de Estados Unidos”, añade Le.
Con su amplia cartera, su liderazgo en áreas como los ecocardiógrafos y las capacidades exclusivas de la solución de ecografía de mano Lumify, Philips está perfectamente posicionada para apoyar a los profesionales sanitarios con soluciones tecnológicas necesarias para combatir la pandemia.
La solución de ecografía Lumify, que opera en conjunción con un smartphone o una tableta compatible, es el primer dispositivo de ecografía ultraportátil del mundo con funciones avanzadas de telemedicina. La plataforma de comunicación Reacts posibilita videollamadas bidireccionales con transmisión en directo de la ecografía, de forma que varios clínicos pueden ver a la vez la imagen por ultrasonido y la ubicación de la exploración, al mismo tiempo que discuten el resultado e interactúan. En el contexto de la pandemia por COVID-19, esta solución ayuda a minimizar el riesgo de transmisión del virus para el equipo médico.
La nueva guía desarrollada por Philips destaca los valores preestablecidos específicos, transductores, herramientas de cuantificación y otras posibilidades disponibles en los sistemas de ecografía de la compañía que son relevantes a la hora de evaluar y tratar complicaciones derivadas del COVID-19. Por ejemplo, el sistema premium de ecografía cardíaca EPIQ CVx incluye aplicaciones automatizadas para evaluación 2D del corazón, así como la posibilidad de realizar mediciones sólidas en 3D del volumen del ventrículo derecho y de la fracción de eyección.
La autorización concedida por la FDA abarca a los siguientes sistemas de ecografía de Philips: serie EPIQ, serie Affiniti, Lumify, CX50 y Sparq, así como soluciones específicas como el software de cuantificación avanzada QLAB. Para más información sobre cómo está respondiendo Philips a la pandemia de COVID-19, consulte el centro de información global de la compañía.
Un equipo de científicos argentinos trabaja contrarreloj para desarrollar un método simple y económico de PCR (reacción en cadena de polimerasa) que permita detectar la presencia del coronavirus SARS-CoV-2 a partir de hisopados de pacientes.
Para lograr ese objetivo, los científicos de la UBA, de la UNSAM y del CONICET están modificando los protocolos de la compleja técnica convencional de referencia hoy en uso, PCR en tiempo real o RT-qPCR, que permite amplificar y detectar material genético del virus con fines de diagnóstico.
“Nos proponemos lograr una simplificación en la preparación del ARN (material genético) del virus, evitando la necesidad de columnas comerciales para su purificación”, indicó Alberto Kornblihtt, director del proyecto e investigador del Instituto de Fisiología, Biología Molecular y Neurociencias (IFIBYNE), que depende de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA y del CONICET.
Kornblihtt e integrantes de su equipo y de otros laboratorios del IFIBYNE, como Anabella Srebrow, Ezequiel Petrillo, Manuel Muñoz, Manuel de la Mata, Ignacio Schor y Valeria Buggiano, también apuntan a reemplazar ciertos reactivos caros por otros más estándares.
“En ambos casos será necesario comprobar la sensibilidad y la especificidad de las nuevas técnicas introducidas. No es cuestión de abaratar para empeorar la calidad del ensayo”, afirmó Kornblihtt, quien añadió que las pruebas deberán ser realizadas en laboratorios de análisis clínicos o de investigación.
Los test de PCR se complementan con los serológicos que miden anticuerpos contra la proteína “spike” del SARS-CoV-2, algunos llamados “rápidos” y otros más precisos como el desarrollado días atrás por científicos de la Fundación Instituto Leloir, de la UNSAM y del CONICET, y que son muy útiles para tener un panorama epidemiológico de la enfermedad o incluso identificar potenciales donantes de plasma.
El proyecto fue seleccionado luego de presentarse a una convocatoria de la Agencia de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación en el marco de la Unidad COVID-19, un dispositivo de coordinación impulsado por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación. Y resulta una oportunidad para revalorizar el rol de la llamada ciencia básica o sin aplicaciones inmediatas.
“Así como a nivel político y económico esta pandemia destruirá el mito de que el mercado soluciona todos los problemas con la libre competencia, también se caerá el mito de que no vale la pena fomentar la ciencia básica en nuestro país porque no sirve para nada”, afirmó Kornblihtt. La investigación básica “genera personas entrenadas para pensar y para resolver problemas que van cambiando con la coyuntura”, añadió.
Aunque no son virólogos o inmunólogos, los integrantes del proyecto son investigadores jóvenes con amplia experiencia en la biología del ARN y, sobre todo, en los detalles experimentales de su preparación y de la PCR en tiempo real que vienen usando desde hace años en sus investigaciones básicas, destacó Kornblihtt. “Son gente que está acostumbrada a modificar ingredientes y concentraciones de los kits. Por eso, pensamos que podemos aportar técnicamente”, puntualizó el investigador.
“El diagnóstico se basa en aislar el genoma viral, constituido de ARN. Luego, se hace una reacción de retrotranscripción, que es pasar ese ARN a ADN. Tras lo cual, se procede a realizar la PCR, que genera muchas copias de ese ADN, de manera de hacerlo detectable. Es una de las formas más utilizadas por su sensibilidad y porque ofrece datos muy robustos acerca de si alguien tiene o no la enfermedad”, precisa Ezequiel Petrillo, investigador del IFIBYNE y director de uno de los seis grupos que llevarán adelante esta iniciativa.
La propuesta busca diagnosticar, de manera más económica que la usada en la actualidad, la presencia del virus en las muestras.
“Básicamente, nosotros proyectamos no usar kits importados, que es lo caro, y que cada vez serán más difíciles de conseguir a medida que la pandemia avance. Nuestra materia prima serían directamente los reactivos necesarios. Y, en lo posible, trataremos de emplear productos de la Argentina, para no depender de elaboraciones de afuera. Es como si habláramos de una sopa instantánea o una hecha en casa a partir de los ingredientes individuales”, compara Petrillo.
Si las investigaciones avanzan según lo planeado, calculan que en un plazo de dos a cuatro meses ya deberían empezar a realizar diagnósticos y comparar sus resultados con los análisis que se llevan adelante en el Instituto Malbrán, a partir de compartir las muestras de los mismos pacientes. “Comenzamos una colaboración con el Instituto de Investigaciones Biomédicas en Retrovirus y SIDA (INBIRS). Ellos ya están haciendo diagnóstico. Entonces, ellos hacen su protocolo estándar, y nosotros, el nuestro, sobre la misma muestra, para verificar si funciona igual. Sería -puntualiza Petrillo- una validación de nuestro protocolo de trabajo”.
De la iniciativa también participan investigadores del Instituto de Investigaciones Biomédicas en Retrovirus y SIDA (INBIRS), que depende de UBA y CONICET, y de las facultades de Medicina y de Farmacia y Bioquímica de la UBA.
La Organización Mundial de la Salud monitorea continuamente el avance del coronavirus en el mundo. La organización brinda preguntas y respuestas se que se actualizan a medida que se conocen más datos sobre la Covid‑19, su modo de contagio y la forma en que está afectando a las personas en todo el mundo.
En las últimas horas se incluyó en el documento de la OMS dos señales de alarma: “Las personas de cualquier edad que tengan fiebre o tos y además respiren con dificultad, sientan dolor u opresión en el pecho o tengan dificultades para hablar o moverse deben solicitar atención médica inmediatamente”.
La dificultad para hablar o moverse, junto a los demás síntomas más habituales conocidos de la Covid‑19 como la fiebre, la tos seca y el cansancio y otros síntomas menos frecuentes que afectan a algunos pacientes son los dolores y molestias, la congestión nasal, el dolor de cabeza, la conjuntivitis, el dolor de garganta, la diarrea, la pérdida del gusto o el olfato y las erupciones cutáneas o cambios de color en los dedos de las manos o los pies. Estos síntomas suelen ser leves y comienzan gradualmente. Algunas de las personas infectadas solo presentan síntomas levísimos.
Según la organización la mayoría de las personas, alrededor del 80%, se recuperan de la enfermedad sin necesidad de tratamiento hospitalario. Alrededor de 1 de cada 5 personas que contraen la Covid‑19 presenta un cuadro grave y experimenta dificultades para respirar. Las personas mayores y las que padecen afecciones médicas previas como hipertensión arterial, problemas cardíacos o pulmonares, diabetes o cáncer tienen más probabilidades de presentar cuadros graves. Sin embargo, la OMS aclara “cualquier persona puede contraer la Covid‑19 y caer gravemente enferma”.
En esta guía la organización explica que una persona puede contraer esta enfermedad por contacto con otra que esté infectada por el virus. La enfermedad se propaga principalmente de persona a persona a través de las gotículas que salen despedidas de la nariz o la boca de una persona infectada al toser, estornudar o hablar.
Una persona puede contraer la Covid‑19 si inhala las gotículas, otras de estas gotas pueden caer sobre los objetos y superficies de modo que otras personas pueden infectarse si tocan esos objetos o superficies y luego se tocan los ojos, la nariz o la boca. “Por ello es importante lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón o con un desinfectante a base de alcohol”, advierte la OMS.
Cuatro pacientes de 20, 30, 40 y 73 años con Covid-19 recibieron plasma sanguíneo de personas ya recuperadas de la enfermedad para generarles los anticuerpos necesarios y poder así ayudarlos a combatir la infección, un procedimiento médico efectuado por primera vez en la provincia de Buenos Aires en el contexto de una pandemia, informaron hoy fuentes médicas y municipales.
El procedimiento se realizó en el Hospital de Trauma Federico Abete de la localidad de Malvinas Argentinas, a cuatro hombres que estaban internados desde hace 10 días, tres de ellos con evolución moderada de Covid-19 y el otro en un estado crítico de la enfermedad.
La introducción de plasma sanguíneo de un paciente recuperado de coronavirus "es una herramientas más que tenemos los médicos para combatir la enfermedad, es una chance más que tiene el paciente, es una suerte de vacuna que podemos darle con los anticuerpos que generó otro paciente recuperado", dijo Dolores Ouviña, secretaria de salud del municipio.
La transfusión de plasma sanguíneo e pacientes recuperados a otros que estén cursando la enfermedad fue aprobado la semana pasada, con su respectivo protocolo, por el Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires y hoy se aplica por primera vez a cuatro pacientes en el partido de Malvinas Argentinas.
En un comunicado, la cartera sanitaria había indicado que, a través del Instituto de Hemoterapia y el Cucaiba (Centro Único Coordinador de Ablación e Implante de la provincia de Buenos Aires) se avanzaba en el tratamiento de recuperación de pacientes críticos afectados por la Covid-19.
“Este plasma es rico en anticuerpos y podría ayudar en la recuperación de los pacientes críticos de coronavirus”, señaló la directora provincial del Instituto, Nora Etchenique.
Tres de los pacientes, de 20, 30 y 40 años, tenían un estadío moderado de la enfermedad, mientras que el de 73 años es el más crítico.
"La evolución en los tres pacientes moderados es buena luego de la transfusión del plasma, para nosotros buena quiere decir que de moderado no pasan a un estado grave, mientras que el paciente de 73 años presentó una buena evolución al principio pero como tiene otras enfermedades hay días que avanza y otras que retrocede", explicó Ouviña.
La secretaria, quien también es médica, explicó que esto "es un logro de todo el servicio de hemoterapia del hospital. Nosotros ya lo veíamos venir este método, porque ya fue utilizado en otros países con la gripe H1 N1 y con el ébola, sabíamos que se venía a la provincia de Buenos Aires, sólo faltaba que el Ministerio aprobara los protocolos".
Para Ouviña el sistema funcionó de manera muy rápida, el jueves pasado a la mañana pedimos al Instituto de Hemoterapia el plasma sanguíneo y ya por la tarde lo fuimos a buscar y se los fuimos dando a los pacientes".
Por su parte Javier Melis, subdirector del Hospital, dijo que "no hay tratamiento para darle a los pacientes y decirles con esto estamos salvados, lo que hacemos es darle un mecanismo para lograr una contención inmediata y disminuir la mortalidad".
"Esta medida se llama inmunización pasiva, es decir la administración de anticuerpos con actividad frente a determinados patógenos, esto tiene la función de prevenir y tratar la enfermedad", explicó Melis.
Melis destacó que por ahora "los plasmas están concentrados en el Instituto de Hemoterapia pero pueden haber varios centros en los que los pacientes recuperados pueden ir a donar su plasma",
Precisó además que "nosotros le aplicamos el plasma y vamos comunicando día a día como evolucionan los pacientes, la primera indicación para recibir el plasma es que estén internados. Son pacientes graves que ingresan con infiltraciones colaterales o potencialmente graves".
"Esto no es la cura, son métodos para tratar de bajar la mortalidad de lo que ya esta provocado, darles los anticuerpos que generó otra persona para poder frenar el virus", aseguró Melis.
El médico indicó, además, que "tuvimos una respuesta bárbara de la provincia para buscar el plasma" y detalló: "La única manera de salir de esto es con un equipo aquí no hay héroes".
"Estamos todos a la expectativa de que esto pueda funcionar, es el día a día, son cuatro pacientes en terapia intensiva, por lo que su evolución es muy dinámica. Ya funcionó con la Gripe A esperemos que sea con el Covid-19 también", destacó
Por su parte, el intendente de Malvinas Argentinas Leonardo Nardini aseguró: "Si no se trabajara seriamente, aplicando los protocolos vigentes y realizando el seguimiento correspondiente a los pacientes internados, no se hubiera logrado que las autoridades provinciales destinen este recurso a pacientes internados en Malvinas",
En el Hospital Malvinas Argentinas, centro de referencia de la zona oeste del conurbano, hay 12 pacientes internados con Covid-19,algunos en terapia común y otros en intensiva.
El sistema de salud argentino, de acuerdo a su financiación y organización institucional, se caracteriza por la segmentación en tres subsistemas: el público, de la seguridad social y el privado. El Gasto Total en Salud, cuando irrumpió la pandemia, representaba el 9,4% del Producto Interno Bruto (PIB), 2,7% correspondía al Gasto Público; el 3,9%, al Gasto de la Seguridad Social -incluyendo PAMI, y el restante 2,8% al Gasto Privado.
La disponibilidad de recursos hospitalarios es uno de los factores claves para hacer frente a esta emergencia. En Argentina, previo a la pandemia se contabilizaban 26.985 establecimientos asistenciales de salud y 220.910 camas disponibles.
En América Latina, Argentina, con 4,4 camas cada mil habitantes, es el país con mayor cantidad de camas disponibles en esta métrica, equiparable al valor alcanzado por China antes de ser desafiada por el Covid-19. Sin embargo, esta cifra está por debajo del promedio de la OCDE y de la recomendación de la OMS.
Los Recursos Humanos, son un pilar básico del sistema sanitario intensivo en mano de obra, la razón de médicos cada mil habitantes que posee nuestro país se asemeja al valor de Italia y supera a Estados Unidos actual epicentro del virus. En el interior de Argentina, las desigualdades son marcadas, CABA con 13,2 médicos cada mil habitantes, mientras provincias del Norte, como Santiago del Estero, Misiones, Formosa y Chaco, cuentan con apenas tienen 2 médicos cada mil habitantes.
El 2020 fue declarado por la OMS año de la enfermería, y de acuerdo a este organismo, el personal de enfermería conforma más de la mitad de la fuerza de trabajo en el sector salud y cubre el 80% de las necesidades de atención. Argentina cuenta aproximadamente con 200 mil profesionales técnicos, auxiliares y licenciados en esta disciplina, la recomendación de la OMS se estima alrededor de 4 a 5 enfermeros cada 1.000 habitantes. Si bien este es un déficit global en la región, para algunas provincias argentinas, la necesidad de contar con enfermeros es aún mayor, tal es el caso de jurisdicciones como Santa Fe, Misiones y Formosa.
Moderna Inc. informó que su vacuna experimental contra el COVID-19 mostró resultados prometedores en sus estudios iniciales y espera pasar en julio a la siguiente fase de la investigación con ensayos clínicos. La vacuna, llamada mRNA-1273, además resultó ser segura en general y fue bien tolerada en los estudios preliminares, dijo la farmacéutica.
Los niveles de los anticuerpos presentados en los voluntarios fueron similares a los de las muestras de sangre de personas que se recuperaron de COVID-19, mostraron los primeros resultados del estudio realizado por los Institutos Nacionales de Salud.
Los participantes recibieron tres dosis diferentes de la vacuna y Moderna dijo que vio un aumento dependiente de la dosis en la inmunogenicidad, la capacidad de provocar una respuesta inmune en el cuerpo.
Otro de los puntos muy destacado es que también se descubrió que la vacuna mRNA-1273, en general es segura y bien tolerada en el estudio inicial, dijo el laboratorio. Moderna Inc. lidera los esfuerzos globales en el desarrollo de una vacuna para el nuevo coronavirus y la semana pasada ganó la etiqueta de “vía rápida” de la agencia de salud de los Estados Unidos para acelerar la revisión regulatoria. Está buscando comenzar los ensayos en etapa tardía en julio.
Como consecuencia del anuncio de la farmacéutica, las acciones futuras de Nueva York presentaban fuertes subas. Lo mismo ocurría con los mercados de valores de Europa.
Hace 11 días la Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) había aprobado que la vacuna de Moderna para el coronavirus proceda a la fase dos de su estudio. La información había sido dada a conocer la propia compañía este jueves en un comunicado de prensa, en el que indicó que se estima que la nueva fase comience en breve.
“La Administración de Drogas y Alimentos de los EEUU (FDA) completó su revisión de la solicitud de Investigación de Nuevos Medicamentos (IND) de la compañía para su nuevo candidato a la vacuna contra el coronavirus (SARS-CoV-2 o COVID-19) (ARNm-1273), que le permite pasar a la Fase 2 de estudio. Se espera que comience en breve. El protocolo de finalización para el estudio de Fase 3 del ARNm-1273, se espera que comience a principios del verano de 2020”, indica el comunicado de Moderna.
La vacuna mRNA-1273 fue la primera norteamericana en comenzar las pruebas clínicas en Estados Unidos. El ensayo ayudará a los investigadores a evaluar si la vacuna es segura, quién produce la respuesta inmune más fuerte que podría defenderse de la cepa letal y cuál debería ser la dosis eficiente para tratar el mal.
Esta vacuna -como todas las que están en proceso- utiliza una tecnología basada en genes conocida como ARN mensajero. El ARN mensajero, o ARNm, lleva instrucciones del ADN a las células del cuerpo para producir ciertas proteínas. Una vacuna de ARNm nunca ha sido aprobada para prevenir enfermedades infecciosas.
El presidente Alberto Fernández anunció hoy la creación de testeos rápidos para detectar el coronavirus que fueron desarrollados por científicos argentinos.
El kit de diagnóstico rápido de tipo PCR, que ya fue aprobado por la ANMAT, lo desarrollaron el Conicet, la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación y científicos y científicas del Instituto de Ciencia y Tecnología Dr. César Milstein (Conicet - FunTecnológico y la Innovacióndación Pablo Cassará).
“No se cómo esto funciona en el mundo, pero los test rápidos (serológicos) no servían para conocer si uno está infectado o no, y estoy feliz de que (este kit) lo hayan hecho científicos argentinos. Estoy encantado. Tenemos la mejor calidad humana, científica, para ofrecer estas respuestas, y la Argentina los ha maltratado”, dijo el Presidente durante una reunión que mantuvo con los ministros de Salud, Ginés González García y de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, Roberto Salvarezzala; la titular del Conicet, Analía Franchi, y los científicos Adrián Vojnov y Carolina Carrillo.
El Presidente agregó: "esto lo han hecho investigadores argentinos y lo produce un laboratorio argentino" Es tan importante para el desarrollo de un país porque esto demuestra que no dependemos de otros, esto es soberanía, y eso es lo importante y lo que todos deben entender. Los que siempre menospreciaron y no valoraron el trabajo de los científicos, los que piensan que Argentina está condenada a tener un rol de segunda en el mundo, somos capaces de hacer esto, que tiene un valor incalculable”.
Según informó el Gobierno, estos tests van a ser utilizados por el sector público para diagnosticar a pacientes con síntomas de COVID-19.
"Los primeros 10 mil test serán producidos durante los próximos 10 días, y en el corto plazo se podrían elaborar 100 mil test por semana"
En tanto, el primer mandatario agregó: “Estoy muy contento por muchos motivos: primero esto nos permite enfrentar el control de la pandemia de otro modo. No es el mejor modo ver cuántos de nosotros estamos inmunizados, que es lo que hacemos hoy con el test rápido, sino que (este nuevo test) nos permite conocer rápidamente quien está infectado y quién no, y tratarlo a partir de allí. También nos permite conocer quién está infectado y no tiene síntomas, que es uno de los problemas de los que siempre hablamos”.
En un comunicado, el Gobierno informó que " se proyecta una producción local de casi 500 kits por semana que permitirá alcanzar los 200 mil testeos mensuales" y que “el NEOKIT-COVID-19 permite testear muestras de ARN y no requiere equipamiento complejo (como los termocicladores en tiempo real)”.
Además, el Ejecutivo detalló que “el método que se usa en la actualidad para hacer el diagnóstico y el monitoreo es la Reacción en Cadena de la Polimerasa (PCR) en tiempo real, que conlleva una duración de 7 horas, y el resultado es informado al día siguiente. El nuevo test, que constituye un logro del Estado nacional en el marco de la pandemia de coronavirus, también tiene la ventaja de que puede mantenerse a temperaturas de entre 4 y 8 grados, sin la necesidad de un freezer”.
Tras el anuncio, el Presidente se reúne en la Quinta de Olivos con el jefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, y el vice, Diego Santilli. “El nuevo test rápido será fundamental para diagnosticar casos de Covid-19 en los barrios populares de la Ciudad de Buenos Aires, donde en los últimos días ha aumentado el contagio de forma considerable. Seguimos trabajando unidos para cuidar la salud de nuestra gente”, publicó Fernández en su cuenta de Twitter, un posteo que acompañó con la foto junto a Rodríguez Larreta y Santilli.
El 16 de mayo se conmemora el Día Mundial del Angioedema Hereditario (AEH), una condición que causa edemas severos y dolorosos en zonas como el rostro, abdomen, manos o pies, e incluso puede presentarse en órganos internos o en las vías aéreas superiores y poner en riesgo la vida. La enfermedad se caracteriza por episodios de hasta 96 horas de duración, en los que se ve afectada la capacidad de realizar actividades cotidianas como peinarse, vestirse o caminar. También genera dolores incapacitantes y riesgo de vida, en función del lugar donde se produzca el edema.
Consultada sobre el contexto actual de pandemia por COVID-19 y su relación con el AEH, la Sra. Alejandra Menéndez, Presidenta de la Asociación Argentina de Angioedema Hereditario (AEH Argentina), afirmó que si bien los expertos del mundo coinciden en que esa condición no implica un factor de riesgo en sí mismo, "cualquier alteración del sistema inmunológico puede ser disparadora de una crisis, por lo que es de vital importancia disponer inmediatamente de los tratamientos indicados para todos los pacientes".
Como en los últimos años se avanzó mucho en el conocimiento de la enfermedad y particularmente en el tratamiento de las crisis, se insiste en la educación del paciente y en la importancia del uso de la medicación para el tratamiento de los ataques agudos ni bien se empiezan a percibir los primeros síntomas.
"Además de bregar porque cada paciente tenga la medicación a su disposición, hoy estamos abocados también a enfocar la enfermedad más allá de las crisis, es decir, teniendo en cuenta todo lo que sucede en la vida diaria. Ahí es ahí donde nos encontramos con un sinfín de afecciones, que van desde el miedo a planificar a futuro hasta la depresión y ansiedad, que condicionan seriamente la calidad de vida. De esta manera podemos comprender que la carga de la enfermedad es algo que acompaña a los pacientes todos los días, lo que ha cambiado el paradigma de abordaje del AEH", explicó por su parte el Dr. Daniel Osvaldo Vázquez, médico especialista jerarquizado en Alergia e Inmunología y director del Comité Científico de AEH de la Asociación Argentina de Alergia e Inmunología Clínica (AAAeIC).
Asimismo, desde Takeda se sumaron a la conmemoración del Día Mundial del AEH e invitaron a aunar esfuerzos para aumentar el grado de concientización y mejorar la calidad de vida de los pacientes.
"Nos preocupa particularmente poner el foco en los pacientes y ayudar a tomar conciencia sobre cómo la enfermedad afecta la calidad de vida, el aspecto emocional y los cuidados que se deben tener para llevar una vida plena", sostuvo Gastón Domíngues Caetano, Head de Takeda para Cono Sur.
Se calcula que entre 1 de cada 10 mil y 1 de cada 50 mil personas presentan AEH, por lo que en nuestro país habría cerca de 900 pacientes. A diferencia del angioedema alérgico, el edema en el AEH es causado por deficiencia o mal funcionamiento de una proteína (llamada proteína plasmática C1 Inhibidor) que, al no poder realizar su función reguladora en forma normal, provoca un desequilibrio bioquímico que aumenta la permeabilidad vascular y desencadena así los edemas, que son los síntomas clínicos de la enfermedad.
Si uno de los padres presenta la enfermedad, tiene un 50% de posibilidades de transmitirla a cada hijo. Por ello es muy común que haya más de un caso en cada familia, por lo que una vez que uno de los miembros es diagnosticado es sumamente importante estudiar a los demás integrantes, inclusive a aquellos asintomáticos.
Pese a que la mayoría de los casos tiene origen genético, 1 de cada 4 pacientes (25%) con AEH no presenta antecedentes familiares y desarrolla la enfermedad por lo que técnicamente se denomina una "mutación a novo", que los convierte en los primeros en trasmitirla a su descendencia.
No obstante, existe un elevado subdiagnóstico del AEH, por lo que muchos argentinos transitan por su vida sabiendo que tienen alguna condición aparentemente "alérgica", pero sin contar con el diagnóstico correcto y, consecuentemente, desprotegidos frente a un episodio potencialmente mortal.
"En condiciones óptimas, es decir, correctamente diagnosticados y con acceso a los tratamientos modernos, los pacientes con AEH pueden tener una muy buena calidad de vida. Sin embargo, se ha comprobado que la carga de la enfermedad y el riesgo de vida latente en los episodios severos generan un impacto psicológico y un estado de ansiedad que suele permanecer aún en los períodos asintomáticos. La idea de un episodio severo que amenace nuestra vida no es fácil de desterrar", subrayó Menéndez, quien además es paciente con AEH.
El tipo de episodio más severo se presenta cuando se afectan las vías aéreas superiores: se puede desarrollar un edema de glotis y comprometer la capacidad para respirar, pudiendo ocasionar la muerte. Si un paciente con AEH padece una de estas crisis y no cuenta con el diagnóstico correcto -y, consecuentemente, no tiene a su alcance el medicamento que mejoraría sus síntomas-, no tendrá herramientas para resolver el episodio y podría morir.
"El AEH es una bomba de tiempo y la imprevisibilidad respecto a la frecuencia y/o severidad de las crisis exige que el paciente disponga en todo momento de las dosis requeridas para su tratamiento. Quienes tienen AEH deben contar con su medicación en todo momento y estar siempre preparados para enfrentar una eventual crisis severa. En algunos casos esto todavía no sucede debido a las barreras de acceso, por lo que aún hay mucho camino por recorrer", subrayó Menéndez.
"No debemos olvidar que el primer y gran desafío que atraviesan los pacientes con AEH es la denominada 'odisea diagnóstica'. Al ser una enfermedad poco frecuente, las personas suelen acudir a numerosos médicos hasta recibir el diagnóstico correcto, demorando cerca de 10 años en promedio para finalmente ponerle nombre a su condición. Al desconocer qué enfermedad tienen, acuden a una guardia frente a una crisis y muchas veces les indican tratamientos que no necesitan y que no les mejorarán los síntomas, como medicamentos para la alergia o incluso se los somete a cirugías con diagnóstico de abdomen agudo, cuando en realidad lo que tienen es un gran edema gastrointestinal", describió Vázquez, quien además es ex presidente de la AAAeIC.
Los principales desencadenantes de una crisis de AEH se relacionan con traumatismos mínimos, como tratamientos odontológicos, traumatismos accidentales, infecciones, estrés, ciertos medicamentos y estudios programados como endoscopías y cirugías, aunque también pueden darse sin causa aparente.
Los episodios o crisis se presentan espontáneamente y no suelen durar más de 96 horas. Por las características clínicas los pacientes son en general diagnosticados y tratados como alérgicos, con la gravedad que supone en especial cuando el edema toma la vía respiratoria, ya que estos edemas NO responden al uso de antihistamínicos, corticoides ni adrenalina. Si bien cerca del 30% de los casos presentan síntomas con poca frecuencia o son asintomáticos, otro 30% de los pacientes sin tratamiento tiene más de un ataque al mes y el 40% sufre entre seis y once cada 30 días, lo que muestra la necesidad de disponer de los tratamientos.
"En Argentina contamos con medicamentos de excelencia para tratar los ataques agudos y esperamos que en breve podamos disponer de nuevas alternativas terapéuticas para lo que llamamos tratamientos profilácticos a largo plazo, es decir tratamientos destinados a prevenir la aparición de las crisis y así brindar a los pacientes la posibilidad de tener una mejor calidad de vida y una menor carga de la enfermedad", concluyó Vázquez.
Autoridades del Ministerio de Salud de la Nación dieron a conocer los nuevos criterios para la definición de caso sospechoso de COVID-19 y de contacto estrecho que surgieron a partir de la evolución de la situación epidemiológica y del análisis de los datos con las distintas jurisdicciones del país.
La primera definición es la presencia de fiebre (a partir de los 37.5°) y uno o más de los siguientes síntomas: tos, dolor de garganta, dificultad respiratoria y presencia de una alteración del gusto o del olfato. Esto siempre asociado a un antecedente de viaje en los últimos 14 días; o residir o haber estado en zonas de transmisión local (ya sea comunitaria o por conglomerados) de COVID-19 en Argentina.
“El segundo criterio para definir caso sospechoso agrupa al personal de salud de las fuerzas de seguridad y Fuerzas Armadas, como así también a los residentes, el personal que trabaja en instituciones cerradas o de internación prolongada y los habitantes de barrios populares o de una comunidad originaria, que presenten dos o más de los siguientes síntomas: fiebre (37.5°C o más), tos, dolor de garganta, dificultad respiratoria y alteración del gusto o del olfato”, explicó el subsecretario de Estrategias Sanitarias, Alejandro Costa.
Otro criterio de caso sospechoso son los contactos estrechos de casos confirmados de COVID-19 con la presencia de uno o más de los síntomas antes mencionados.
Por otra parte, si hay una alteración de los sentidos del gusto o del olfato de causa no explicada, se indicará aislamiento durante 72 horas y la toma de muestra para diagnóstico por PCR, al tercer día de iniciado los síntomas.
“Finalmente - indicó Costa - en aquellos lugares donde hay transmisión comunitaria si hay un diagnóstico de neumonía y sin otra etiología que explique el cuadro clínico, se debe sospechar de COVID-19 . Y si hay una infección respiratoria aguda grave sin etiología en un ámbito donde no hay transmisión local, también hay que sospechar de coronavirus”.
Además, se consideran como contactos estrechos a quienes hayan proporcionado cuidados a un caso confirmado mientras presentaba síntomas y sin utilizar las medidas de protección personal adecuadas; y a cualquier persona que haya permanecido a una distancia menor a 2 metros con un caso confirmado con síntomas durante al menos 15 minutos.
En barrios populares, pueblos originarios, instituciones cerradas o de internación prolongada se considera contacto estrecho a toda persona que comparta habitación, baño o cocina con casos confirmados de COVID-19; o que concurra a centros comunitarios (comedor, club, parroquia, paradores para personas en situación de calle) y haya mantenido estrecha proximidad con un caso confirmado, mientras el caso presentaba síntomas (menos de 2 metros, durante 15 minutos).
“El porcentaje de positividad promedio de los tests que está subiendo es el motivo por el cual estamos trabajando con los referentes de epidemiología de todo el país en sensibilizar la definición de caso y en abordar de manera particular la definición de contacto estrecho sobre todo en lugares donde la dinámica de transmisión es diferente y mayor como las comunidades cerradas, los pueblos originarios, los geriátricos, los barrios populares y contextos de encierro”, destacó la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti.
“Se busca seguir trabajando en la detección precoz, en el diagnóstico y en el aislamiento para minimizar la transmisión sobre todo en esas situaciones particulares”
Respecto de los datos epidemiológicos a nivel país, el subsecretario de Estrategias Sanitarias informó que son 6.563 los casos confirmados y 321 los fallecidos por lo que la tasa de letalidad es del 4,9 por ciento. Además hay 147 personas internadas en terapia intensiva y 2.266 recuperadas. La cantidad de test realizados por PCR son 90.474 y porcentaje de positividad es de 8,76.
Catamarca y Formosa siguen sin presentar casos y Jujuy, San Juan, San Luis, La Pampa y Santa Cruz no registran casos de COVID-19 desde hace 14 días.
“La Organización Mundial de la Salud frente a la pandemia ha hecho muy tempranamente una advertencia a los ministerios de Salud de la necesidad, si bien la atención se concentra en los casos de coronavirus, de que no se descuiden los servicios esenciales como la salud reproductiva incluido el control del embarazo y el parto”, expresó la epidemióloga Mabel Bianco, presidenta de Fundación para Estudio e Investigación de la Mujer (FEIM) que participó en el informe diario matutino sobre el nuevo coronavirus.
La epidemióloga advirtió sobre la importancia de contar con acceso a métodos anticonceptivos y de protección de enfermedades de transmisión sexual como el preservativo “que son esenciales o básicos” para evitar un embarazo forzado que definió como “aquel que no pudimos evitar” e infecciones.
También se refirió al abuso sexual en especial en los menores de 19 años. “En este momento hay muchas situaciones que se están dando y hay que prestar atención. El mensaje es que los familiares, vecinos y amigos que vean esto que ayuden a denunciarlo porque es un delito”, pidió Bianco.
Finalmente, Bianco solicitó a los profesionales de salud que “no rechacen a un adolescente que va a pedir un preservativo o un método y que necesita consejo”.